Tener una rutina beneficiosa para tu salud es una de los mejores regalos que puedes hacerte. Hay muchos que hacemos ejercicio, otros comemos de forma saludable, y otros aprendemos Inglés sin darnos cuentas. Para ellos sólo necesitas conocer ciertas rutinas matinales para aprender Inglés que harán que vayas integrando los conocimientos sin darte cuenta.
Las mejores rutinas matinales para aprender Inglés.
Estas rutinas nos darán organización y seguridad. Esto lo puedes comprobar en la forma en la que te levantas todos los días, como te limpias el rostro, hacer el desayuno, tomas el transporte para ir al trabajo… no dudas ni un instante, sabes lo que tienes que hacer y lo haces sin miedo a equivocarte. Ya has creado tu rutina. Eso es lo que hay que conseguir con el Inglés.
Cuantas más rutinas tengan integrado el aprendizaje del Inglés, muchas más sencillo será para ti aceptarlo como un hábito propio. Así el Inglés será parte de tu vida diaria. ¿Parece una buena idea verdad?
Empieza pensando en Inglés.
Al inicio va a serte muy difícil comenzar a pensar en Inglés. Pero no te desesperes, es lo más normal del mundo. Necesitas práctica y si lo haces con constancia todos los días, llegará el momento en el que no te darás cuenta de que lo haces. Puedes comenzar con pequeños retos. Haz ejercicios mentales con todos los actos que haces durante la mañana. Levantarte, ponerte en pie, dar el primer paso, ponerte las zapatillas, estirar los brazos… cada día aprende una palabra o pequeña frase nueva. Y recuérdala al día siguiente. Comienza a decirla en voz alta, en Inglés. Pregunta a tu profesor particular si tienes alguna duda, el siempre podrá darte buenas pautas y consejos para que mejores tu pronunciación.
Llegará el día en el que estas rutinas matinales para aprender Inglés sean parte de tu día a día. Y volverás a buscar otras. Hasta que, sin darte ni cuenta, estarás pensando en Inglés por ti mismo, sin obligarte. Dicen que los hábitos se consolidan a los veintiún días de comenzarlos y seguirlos, así que ten paciencia contigo mismo.
Haz un plan de lo que quieres aprender.
Esto está muy relacionado con marcarte objetivos. Notarás en tu vida diaria que si te marcas objetivos reales y sinceros contigo mismo, empezarás a cumplirlos a tiempo. Nuestro cerebro funciona así, necesitamos tener delante de nuestros ojos aquello que queremos hacer, con un plazo y definiendo las acciones. Este plan deberás hacerlo en Inglés y seguirlo todos los días. Por ejemplo: hoy aprenderé una palabra nueva, un verbo y una acepción gramatical. Estos pequeños y breves planes se irán desarrollando en tu rutina y verás como evolucionas. Te sentirás bien, irás completando tareas y cada vez te será más sencillo hacerlas.
Los inicios de este plan estructura puede que no sean los más sencillos, pero irán dando su fruto. No desesperes y tómatelo como algo divertido. Los niños aprenden así. Cada día es una oportunidad de nueva de aprender, de mejorar por ti mismo. Una forma divertida de hacerlo es escribiendo un horario y poner una alarma. Cada vez que la alarma suene debes repetir el aprendizaje del día. Poco a poco te habituarás y aprenderás a grandes pasos.
Cambia todos tus aparatos a Inglés.
No importa si al principio vas a estar un poco perdido y no vas a saber ni usar tu propio teléfono móvil. Toma tu ordenador, tus tableta, tu móvil, tu servicio de correo electrónico… aprovecha las nuevas tecnologías para aprender Inglés. Cada día cuando despiertes tendrás que desconectar la alarma que estará en Inglés, tendrás que escribir un mensaje en un correo electrónico que está totalmente en Ingles, tendrás que trabajar con un programa que ahora te da las instrucciones en Inglés… Aprendizaje continuo que se convertirá una de las mejores rutinas matinales para aprender Inglés.
Es muy recomendable que también cambies a Inglés tus redes sociales. Allí pasas mucho tiempo y con ello mejorarás mientras las usas. No esperes grandes resultados al instante, date tiempo y sigue usando el idioma. No dejes que los demás te quiten las ganas, sólo tú tienes el poder de aprender Inglés in darte cuenta.
Acostumbra a oír la radio en Inglés.
Cuando te diriges al trabajo puede que te encuentres con un atasco y pases un tiempo encerrado en el coche. Es el momento perfecto para mejorar tu oído y aprender a desenvolverte en Inglés. Cambia tu emisora habitual a una emisora en Inglés. Cada mañana te levantarás escuchando a personas que hablan en otro idioma. No suelen hablar demasiado rápido y suelen tener acentos muy puros. Ese es el que tienes que aprender.
Las canciones pueden que sean un poco más difíciles de identificar, pero si las oyes una y otra vez, buscas la letra en tu teléfono móvil y las sigues, estarás haciendo un ejercicio muy valioso.
¿Habías pensando alguna vez en estas posibilidades?
Querer es poder y el Inglés puede estar en nuestras rutinas si es lo que decidimos hacer. Cuando quieres aprender Inglés tienes que ir a por todas. Con tus cursos de Inglés en Santiago y estos pequeños cambios de rutina, conseguirás muy buenos resultados.
¿Te apetece probar una clase gratis con nuestros profesores?
Te esperamos!
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